Mejora tu Salud

Articulos y consejos para mejorar su salud

Salud

Cómo tratar la secreción ocular en recién nacidos

La secreción ocular es común en los recién nacidos y generalmente ocurre debido a un conducto lagrimal bloqueado. Sin embargo, los padres y cuidadores a menudo pueden tratar esto en casa.

La secreción ocular suele ser inofensiva y se resuelve por sí sola. Sin embargo, la secreción que ocurre junto con otros síntomas en el área de los ojos, como hinchazón o sensibilidad, podría indicar una infección u otro problema ocular. Un padre o cuidador de un recién nacido con estos síntomas deberá consultar a un médico.

Este artículo analiza cuán común es la secreción ocular y explica cómo tratarla en el hogar. También cubrimos el tratamiento médico, otras causas, complicaciones y cuándo contactar a un médico.

Contents

¿Es típico?

Compartir en Pinterest
Suksomboon Dokkulab/EyeEm/Getty Images

La secreción ocular en los recién nacidos es común y rara vez es motivo de preocupación. Una causa común de secreción ocular es un conducto lagrimal bloqueado.

Según la Academia Estadounidense de Oftalmología, casi el 20 % de los recién nacidos tienen un conducto lagrimal obstruido. Esta condición puede ocurrir porque el extremo del conducto lagrimal no se abre correctamente cuando nace el bebé.

Las lágrimas se forman en la glándula lagrimal, que se encuentra justo encima del ojo. El líquido lagrimal ayuda a limpiar y lubricar la superficie del ojo. Cuando una persona parpadea, los párpados barren el líquido lagrimal hacia estos conductos, que lo drenan hacia la nariz.

Si algo bloquea un conducto lagrimal, es posible que el líquido ya no pueda drenarse de la superficie del ojo. Los bloqueos pueden causar ojos muy llorosos y se puede formar una secreción pegajosa en las esquinas.

Obtenga más información sobre los conductos lagrimales bloqueados.

Otras causas

Los conductos lagrimales bloqueados son una causa común de secreción ocular en los bebés. Sin embargo, otras condiciones y factores también pueden causar la descarga.

conjuntivitis

La secreción ocular en los recién nacidos también puede ser un signo de conjuntivitis o conjuntivitis. La conjuntivitis es una inflamación de la conjuntiva, una membrana delgada que protege la parte frontal del ojo. A diferencia de un conducto lagrimal obstruido, la conjuntivitis a menudo hace que la parte blanca del ojo se enrojezca.

Los síntomas de la conjuntivitis en los recién nacidos pueden incluir:

  • drenaje o secreción que se desarrolla entre 5 y 12 días después del nacimiento
  • párpados hinchados o sensibles, a menudo con decoloración de la piel
  • ojos rojos e irritados

La conjuntivitis en los recién nacidos a veces puede ocurrir junto con un conducto lagrimal bloqueado. Sin embargo, una mujer embarazada también puede transmitir una infección bacteriana o viral a su bebé al dar a luz, lo que puede provocar conjuntivitis.

Obtenga más información sobre los síntomas de las infecciones oculares.

irritación química

irritación química también puede causar conjuntivitis en recién nacidos. Los profesionales de la salud suelen administrar gotas antibacterianas para los ojos a los recién nacidos para prevenir infecciones. Estas gotas para los ojos a veces pueden causar irritación que puede provocar síntomas de conjuntivitis.

Obtenga más información sobre la irritación de los ojos.

Tratamiento en el hogar

Si la secreción del ojo se debe a un conducto lagrimal obstruido, generalmente se resolverá sin tratamiento dentro de los 4 a 6 meses.

Sin embargo, el viento, el clima frío y la luz solar intensa también pueden empeorar los síntomas, por lo que los padres o cuidadores deben tratar de proteger los ojos del recién nacido de estos elementos.

Descarga de limpieza

Un padre o cuidador a menudo puede tratar a un recién nacido con un conducto lagrimal obstruido en casa. Antes de tocar la zona cercana a los ojos del niño, es fundamental lavarse las manos con jabón y agua tibia para prevenir infecciones. Una persona también debe tener cuidado de enjuagarse bien las manos después de limpiarlas para evitar que el jabón entre en contacto con el ojo del bebé.

Para eliminar la secreción, sumerja una gasa limpia o un paño suave en agua tibia y luego limpie suavemente la esquina del ojo. Si un lagrimal obstruido afecta a ambos ojos, utilice siempre una nueva zona del paño o gasa para limpiar el otro ojo.

Masaje lagrimal

Un médico también puede recomendar masajear suavemente el conducto lagrimal bloqueado para ayudarlo a abrirse, y le demostrarán cómo hacerlo de manera segura.

Para masajear el conducto lagrimal:

  • Presione ligeramente la punta del dedo índice contra el puente interior de la nariz del recién nacido, en el lado del conducto lagrimal bloqueado.
  • Haga 2 o 3 movimientos cortos hacia abajo con el dedo a lo largo del costado de la nariz. Estos deben ser suaves pero firmes.
  • Realice el masaje dos veces al día, una vez por la mañana y otra por la noche.

Si el costado de la nariz del recién nacido se enrojece o se hincha, detenga el masaje inmediatamente y comuníquese con un médico.

Tratamiento médico

En los recién nacidos, los conductos lagrimales obstruidos tienden a abrirse varios meses después del nacimiento. Sin embargo, la intervención médica puede ser necesaria en algunos casos.

cirugía

Si el bloqueo no ha desaparecido antes de que el bebé tenga 1 año de edad, un médico puede recomendar un tratamiento médico llamado sondeo del conducto nasolagrimal.

Este procedimiento consiste en insertar una pequeña sonda en el conducto lagrimal del bebé. Mediante el uso de sondas que aumentan gradualmente de tamaño, un médico podrá abrir el conducto lagrimal. Luego usarán una solución salina para eliminar cualquier residuo restante.

A veces, el médico también puede insertar un pequeño tubo, o stent, en el conducto para mantenerlo abierto.

el sondeo es generalmente exitoso en la apertura del conducto lagrimal. Para niños con una obstrucción severa, un médico puede recomendar un procedimiento quirúrgico más complicado llamado dacriocistorrinostomía para limpiar y abrir el conducto lagrimal.

antibióticos

Si una infección está causando secreción ocular, el recién nacido necesitará atención médica inmediata. Para tratar casos de flujo infeccioso, un médico puede recetar antibióticos tópicos, orales o intravenosos.

complicaciones

Los conductos lagrimales bloqueados a veces pueden provocar una infección llamada dacriocistitis. Los síntomas de esta condición pueden incluir:

  • secreción espesa excesiva del ojo
  • enrojecimiento en la esquina del ojo
  • un bulto sensible o hinchazón a un lado de la nariz
  • fiebre

Si un recién nacido tiene alguno de estos síntomas, un padre o cuidador debe consultar a un médico.

Cuándo contactar a un médico

Los recién nacidos con secreción ocular u ojos muy llorosos deben hablar con un pediatra o un oculista especializado en niños, llamado oftalmólogo pediátrico. Estos profesionales de la salud pueden diagnosticar la causa de la secreción y detectar signos de infección.

Los padres o cuidadores deben buscar atención médica si la secreción ocular de un bebé persiste durante más de 6 meses.

Los recién nacidos con signos de infección ocular requieren atención médica inmediata. Los signos de una infección ocular pueden incluir:

  • ojos doloridos o hinchados
  • párpados hinchados
  • pus o secreción amarilla o verde
  • un bulto o hinchazón en la esquina interior del ojo

Si un padre o cuidador nota alguno de estos síntomas, debe comunicarse con un médico de inmediato.

Resumen

La secreción ocular en los recién nacidos es común y, a menudo, es el resultado de un conducto lagrimal bloqueado. El bloqueo generalmente desaparecerá por sí solo dentro de 4 a 6 meses.

Sin embargo, los recién nacidos con enrojecimiento de los ojos, secreción ocular o lagrimeo excesivo deben hablar con un médico para diagnosticar la causa y descartar una infección ocular.

Los padres y cuidadores pueden tratar a un bebé con un conducto lagrimal obstruido en casa limpiando cualquier secreción y masajeando suavemente el área dos veces al día. Un médico puede demostrar cómo hacer esto.

La decoloración, la hinchazón o el dolor en el ojo pueden indicar una infección ocular. Hable con un médico de inmediato si un bebé tiene estos signos.

DEJA UNA RESPUESTA

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *