La función ejecutiva es un amplio grupo de habilidades mentales que permiten a las personas completar tareas e interactuar con otros. La función ejecutiva desordenada puede afectar la capacidad de una persona para organizarse y controlar su comportamiento.
El trastorno de la función ejecutiva no es un diagnóstico o afección independiente específico. En cambio, los trastornos neurológicos, de salud mental y del comportamiento, como la depresión y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), pueden afectar la función ejecutiva de una persona.
Ocasionalmente, los profesionales de la salud pueden referirse a la función ejecutiva desordenada como disfunción ejecutiva.
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¿Qué es la función ejecutiva desordenada?
Las habilidades de funciones ejecutivas ayudan a las personas a completar tareas e interactuar con otros. Incluyen una variedad de habilidades, tales como:
- planeando y organizando
- concentrar y manejar el enfoque mental
- analizar y procesar información
- manejar las emociones y el comportamiento
- recordando detalles
- administrando el tiempo
- multitarea
- resolviendo problemas
Un trastorno de la función ejecutiva afecta algunas de estas habilidades, lo que puede afectar la capacidad de una persona para administrarse y organizarse para lograr objetivos.
sin embargo, el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, 5ª edición (DSM-5) no reconoce el trastorno de la función ejecutiva como una condición de salud mental específica. En cambio, los problemas de la función ejecutiva son síntomas de otros trastornos neurológicos, de salud mental y del comportamiento.
Por ejemplo, la depresión puede afectar ciertas funciones ejecutivas, como la memoria, la atención y el manejo de las inhibiciones. La enfermedad de Alzheimer a veces también puede afectar gravemente la función ejecutiva hasta el punto en que una persona ya no puede conducir, vestirse o comportarse adecuadamente en situaciones sociales.
síntomas
Las personas con problemas de la función ejecutiva pueden tener los siguientes síntomas:
- Problemas para manejar las emociones o los impulsos.
- problemas para comenzar, organizar, planificar o completar tareas
- problemas para escuchar o prestar atención
- problemas de memoria a corto plazo
- incapacidad para realizar múltiples tareas o equilibrar tareas
- comportamiento socialmente inapropiado
- incapacidad para aprender de las consecuencias del pasado
- dificultad para resolver problemas
- Dificultad para aprender o procesar nueva información.
Los problemas con la función ejecutiva pueden conducir a:
- Rendimiento afectado en el trabajo o la escuela
- Dificultad para formar o mantener relaciones.
- problemas de humor
- baja autoestima
- evitación de tareas difíciles
- baja motivación o pérdida de interés en las actividades
La función ejecutiva tarda en desarrollarse, por lo que muchos de estos comportamientos son típicos de los niños pequeños. Sin embargo, si estos comportamientos persisten, pueden indicar que el niño tiene dificultad con la función ejecutiva.
¿Cómo se relaciona con el TDAH?
El TDAH es un deterioro del neurodesarrollo de la función ejecutiva que puede causar hiperactividad, impulsividad y falta de atención.
Los síntomas del TDAH pueden variar en tipo y gravedad, pero pueden
- inquietud, inquietud, no poder quedarse quieto y hablar en exceso
- actuar sin pensar y comportarse de manera socialmente inapropiada
- a menudo interrumpe las conversaciones o actividades de otras personas
- ser propenso a la distracción o tener un período de atención corto
- cometer errores por descuido en el trabajo o en el trabajo escolar
- tener dificultad para organizar, completar o concentrarse en las tareas
- olvido general
Las personas con problemas de funciones ejecutivas pueden tener TDAH. Sin embargo, el TDAH no es la única condición que puede afectar la función ejecutiva.
causa
Las condiciones que pueden causar problemas de la función ejecutiva incluyen:
- TDAH
- depresion y ansiedad
- trastorno bipolar
- esquizofrenia
- trastorno obsesivo compulsivo (TOC)
- autista
- Enfermedad de Alzheimer, demencia frontotemporal y demencia con cuerpos de Lewy
- Síndrome de Tourette
- lesiones traumáticas en el cerebro
Las causas temporales de los problemas de la función ejecutiva pueden incluir:
- agotamiento
- dolor severo
- estrés
- ambientes que distraen
- drogas
- alcohol
diagnóstico
Los médicos pueden usar una variedad de pruebas para ayudar a evaluar la función ejecutiva de una persona.
Por ejemplo, en la prueba de colores y palabras de Stroop, una persona mira los nombres de los colores que aparecen en tintas de diferentes colores. Entonces, la palabra «rojo» puede aparecer en tinta verde y la palabra «amarillo» puede aparecer en tinta azul. Para cada palabra, la persona tiene que decir cuál es el color de la tinta en lugar del nombre del color escrito. Esta prueba puede ayudar a evaluar el manejo mental y la atención selectiva de una persona.
Otras pruebas que un médico puede usar para evaluar la función ejecutiva incluyen:
- hacer senderos
- dibujo de reloj
- fluidez verbal
- clasificación de tarjetas
Si un médico sospecha un trastorno específico, como el TDAH, puede omitir las pruebas de funcionamiento ejecutivo y, en cambio, comparar los síntomas de la persona con los criterios de diagnóstico estándar para ese trastorno.
Un médico también puede recomendar pruebas adicionales para descartar otras causas. Por ejemplo, pueden solicitar una resonancia magnética para descartar un accidente cerebrovascular o un tumor cerebral en personas con signos de demencia.
tratos
El tipo de tratamiento dependerá de la afección que cause los problemas de la función ejecutiva.
Algunos trastornos neurológicos, en particular la demencia, son progresivos. Aunque algunos tratamientos pueden ayudar a retrasar la enfermedad, los síntomas pueden volverse más severos con el tiempo.
Sin embargo, muchas causas de los problemas de la función ejecutiva son altamente tratables.
Las opciones de tratamiento pueden incluir:
- medicación estimulante
- antidepresivos
- medicamentos antipsicóticos
- psicoeducación
- terapia ocupacional o del habla
- terapia cognitiva conductual (TCC)
Resumen
La función ejecutiva es un conjunto de habilidades mentales que ayudan a las personas a planificar, organizar, administrar su tiempo, prestar atención, procesar información y controlar su comportamiento. Los problemas de la función ejecutiva pueden afectar todo, desde cómo una persona interactúa con otras personas hasta su capacidad para aprender y trabajar.
Una causa común de problemas de funciones ejecutivas es el TDAH, pero otras causas pueden incluir demencia, depresión, esquizofrenia, autismo y lesiones traumáticas en el cerebro.
El diagnóstico de la causa de los problemas de la función ejecutiva puede ayudar a identificar opciones de tratamiento, como medicamentos y terapia. Los signos de problemas de la función ejecutiva incluyen desorganización crónica, falta de concentración, problemas de memoria y comportamiento socialmente inapropiado.